Las universidades en gran parte del mundo están digitalizando cada vez más sus operaciones. La enseñanza, la preparación de exámenes en línea, la toma de decisiones basadas en el aprendizaje del uso de datos y promover un campus virtual son solo algunos ejemplos de un ecosistema académico en expansión. El mundo empresarial está lleno de competitividad, eso es una constante. Por ende, la educación continua es considerada por varias instituciones académicas como un vehículo para no formar profesionales rezagados en el campo profesional; siendo capaces de sobresalir ante ambientes de trabajo volátiles.

Las instituciones de educación superior, en su mayoría, no se digitalizan solas y utilizan plataformas digitales para sus operaciones diarias, hasta el punto de construir áreas establecidas que apoyan la expansión y el alcance, como, por ejemplo, de programas de educación continua. Una vez entendido este contexto, es más fácil entender por qué las universidades optan por crear espacios o plataformas para la implementación de cursos masivos o la implementación de un sistema de gestión del aprendizaje (LMS). Estos recursos académicos reflejan la capacidad de una institución en adaptarse a las vanguardias tecnológicas, implementar modelos flexibles y ahorrar costos en el camino.

Educación Continua
Podemos definir la educación continua como el modelo donde estudiantes o trabajadores pueden expandir sus conocimientos y habilidades de forma enfocada y particular frente a un tema o materia específica. Este es un modelo que va más allá de un sistema formal de aprendizaje, pero cuenta con alta calidad académica, flexibilidad acorde a las necesidades de las personas y aprovechamiento del tiempo dada su corta duración (en comparación con otros programas académicos).

Podemos encontrar modelos de educación continua en forma de diplomados, talleres, charlas, conferencias o cursos que propician la experimentación de contenidos y métodos, siendo útiles tanto para estudiantes, trabajadores, docentes, empresas o universidades que desean mantener a sus equipos actualizados, logrando así una optimización de los recursos y un aumento de la competitividad en el mercado.

Entre los elementos que fortalecen un proceso de educación continua podemos considerar los siguientes:

• La generación y aplicación del conocimiento a distancia en todos los niveles educativos
• Desarrollo y aplicación de propuestas pedagógicas innovadoras
• Formación, capacitación y actualización permanente entre los recursos humanos
• Generar modelos y servicios de administración y organización pertinentes

A continuación, compartiremos tres perspectivas y usos del eLearning en las áreas de educación continua para asegurar un diálogo coherente con la formación de profesionales y las demandas del mundo laboral.

1. Elementos diferenciadores: Estrategia digital
   Si hay algo seguro en el contexto actual de la educación, es la necesidad de ofrecer servicios inmediatos, accesibles y confiables que le permita tanto a estudiantes como a docentes el rápido acceso a la información. Este tipo de servicios, independiente del dispositivo, requieren de un contenido con altos niveles de personalización. Todo esto soportado por un correcto uso y tratamiento de los datos, con el fin de conocer las capacidades que cada usuario puede tener.
   
   Una estrategia digital permite que todos los esfuerzos realizados por la institución se distribuyan de la mejor manera. Si bien no todo se reduce al uso de tecnología, es necesaria una ruta de posicionamiento digital que impacte en cada uno de los consumidores.
   
   Las universidades deben pensar de forma constante cuáles son sus fortalezas, desventajas, oportunidades y amenazas en comparación a la competencia. Una estrategia efectiva en reconocer qué diferencias existen contra otras instituciones, es la capacidad de incorporar una estrategia digital diferente.
   
   Si la información que se encuentra pautada sobre el curso es efectiva, las personas se interesarán en comprarlo. Debemos permitir que el usuario compre de forma sencilla, aprovechando su tiempo y emotividad a medida que investiga qué servicios adquirir. Una buena práctica dentro del contenido publicitado es que su información cuente con el menor número de páginas; recuerde que el consumidor actual se inclina por lo inmediato. Otro gran motivador para el estudiante a la hora de adquirir un curso es ver recomendaciones reales de estudiantes que ya han tomado el curso.
   
   Por otro lado, es importante trabajar la marca de la institución. Cuente con medios propios, sea una página exclusiva en ofrecer sus servicios o la capacidad de adaptar la información en una aplicación móvil (incluyendo la capacidad de acceder al contenido de forma offline y enviar notificaciones push). De esta forma puede generar nuevos procesos de competencia al ofrecer programas con asequibilidad o con alto nivel de personalización para una mejor experiencia del usuario. Durante la implementación de la educación continua se debe recordar que el docente debe garantizar el conocimiento a la totalidad del grupo. Para ello la automatización de los datos o recursos de cómo fijar recordatorios y procesos de seguimiento, incluso recomendar a un usuario un entrenamiento basado en su desempeño dentro del curso es una alternativa que las instituciones pueden adoptar para proporcionar una experiencia individual a cada alumno, además de diferenciar sus procesos al resto de la competencia.
   
   Por ejemplo, funcionalidades como el diseñador personalizado de aprendizaje (PLD) de Open LMS es un grandiosa alternativa donde al hacer un examen diagnóstico del estudiante, se obtiene la información necesaria para modificar la ruta de aprendizaje de cada usuario, garantizando un modelo personalizado de formación.
   
   Conozca las perspectivas y usos del eLearning en las áreas de educación continua en el blog de Open LMS.

Por: Jorge Montañez - Open LMS